Tendrá lugar el 1 de agosto de 2023 en el grado 9 de Acuario

Acuario es el signo de los cambios radicales, de lo inesperado, sorprendente y novedoso. Está relacionado con lo raro y diferente, con el ingenio y la tecnología, con la humanidad y con la multiplicidad de formas en que la creación se ha manifestado, desde las lejanas estrellas hasta las partículas más pequeñas, con ese fractal a través del cual se despliega la consciencia y que llamamos Universo.

Es una energía revoltosa, rompedora y explosiva, que destruye lo caduco para dar paso a lo nuevo.

Representa el despertar y la renovación, el renacimiento, la agitación, las revoluciones, así como las crisis que preceden a estos sucesos.

Es ese salto cuántico que nos transporta a un nuevo estado de consciencia y la sabiduría que este entraña, representada por las ondas etéreas que ilustran el símbolo de este signo, que tiene como fin revelar las grandes verdades a la humanidad, sacudir consciencias con su visión adelantada a su tiempo y propiciar los cambios necesarios para dar curso al proceso evolutivo.

Cuando la Luna llena tiene lugar en este signo, se nos invita a realizar una introspección reveladora y disruptiva que nos conduzca a un despertar y renacer interior, a un salto cuántico del alma, a una renovación a nivel emocional, psíquico e instintivo, a una reinvención de nuestro mundo íntimo, afectivo y familiar, así como también a un replanteamiento de nuestras necesidades, que precisarán ser abordadas desde una nueva perspectiva, pudiendo ser incluso que surjan nuevas necesidades en respuesta a esas carencias que quizá no habíamos atendido hasta ahora, probablemente porque no éramos lo suficientemente conscientes de estas como para darles voz y permitirles reclamar su espacio, que busca ser llenado y satisfecho.

Independientemente de las necesidades particulares que puedan emerger en nosotros, hay necesidades propias de la energía de este signo que pueden también llegar a surgir como una pulsión interna que será preciso reconocer, aceptar y canalizar adecuadamente. Una de ellas es la necesidad de libertad e independencia, o bien, la de adoptar una actitud irreverente, haciendo las cosas a nuestra manera, yendo a contracorriente, desafiando, sobre todo, los patrones familiares, los condicionamientos ancestrales.

En este sentido, es un momento propicio para hacer un trabajo de constelaciones familiares pues ello facilitará la toma de consciencia acerca de esos patrones de los que es preciso liberarnos para dar curso a nuestra evolución, al tiempo que contribuimos a la liberación y evolución del árbol familiar, soltando patrones obsoletos y limitantes y renovándonos al descubrir los tesoros ocultos, esos dones, capacidades y potencialidades creativas que nuestro linaje nos ha legado, en especial nuestro linaje femenino, no sólo por el hecho de que la Luna representa, además de lo familiar y ancestral, la energía  femenina y maternal, sino porque la Luna nueva que dio inicio a este ciclo lunar tuvo lugar en el femenino signo de Cáncer que, por si fuera poco, es el signo de regencia de la Luna, reafirmando y acentuando así su naturaleza.

Así que es momento de revelar temas pendientes y sanar asuntos relacionados con nuestro árbol familiar y, muy especialmente, con la madre, las abuelas y las tías que, de alguna manera, hayan dejado su impronta en nuestra vida, y abrirnos a recibir sus bendiciones y sabiduría junto a esos dones heredados que buscan emerger en nosotros de forma renovada.

Otra necesidad que surgirá en nuestro fuero interno es la de experimentar un cambio radical en algún área de nuestra vida, representada por la casa de nuestra carta natal por la que se encuentre transitando la Luna durante el momento del plenilunio.

Esta necesidad estará pulsando dentro de nosotros y, de no ser atendida de forma consciente y coherente es posible que se manifieste desde afuera a manera de crisis, rupturas y/o cambios inesperados que pueden remecernos y desestabilizarnos.

Con Urano, dispositor moderno de la Luna llena acuariana, transitando por el signo de Tauro, los cambios a proyectar estarán encaminados generar nuevos recursos o a renovar los ya existentes, a asumir una nueva perspectiva acerca del dinero y los bienes materiales en general, a reformular nuestros valores y renovar nuestra autoestima, así como también a procurarnos seguridad, estabilidad, confort, placer y tranquilidad, y es que a veces hay que agitar las aguas y derribar viejos esquemas para que todo encuentre su lugar, para que las cosas se reajusten en función de nuestras necesidades más acuciantes y de nuestro actual estado evolutivo.

Entonces esa disrupción e inestabilidad inicial ha de acabar por conducirnos a un nuevo estado de consciencia cuya energía este fundamentada en la paz, el disfrute, la fuerza, el esfuerzo, la perseverancia, la practicidad, la solidez y la seguridad, a una nueva forma de sentir más calma, placentera y estable, a una nueva manera de percibir la existencia, más sólida, orgánica y natural, más bella, fértil y próspera.

A nivel emocional, la Luna llena en Acuario puede experimentarse como una energía de frialdad emocional y una actitud de desapego, despreocupación y distensión que puede llegar a rallar en el pasotismo, o bien como un huracán interior que todo lo remece generándonos cierto grado de ansiedad.

En todo caso, este plenilunio promete altos y bajos en nuestro mundo interno, cambios emocionales repentinos que pueden resultar muy inquietantes o excitantes, dependiendo de qué emociones se movilicen.

Algunos pueden llegar a sentir como si se encontraran en una montaña rusa emocional, lo cual puede ser muy estresante y desestabilizador, por lo que será importante aprender a fluir con esa diversidad de emociones, aceptándolas y permitiéndonos sentirlas sin aferramiento, siendo capaces dejarlas ir, una vez experimentadas.

Nuestros instintos pueden estar también algo revolucionados, emergiendo de forma repentina y arrebatadora.

No será diferente con nuestro psiquismo, nuestro inconsciente estará removido y nos mostrará señales de ello.

Los sueños que surgirán en torno a este plenilunio y a lo largo de este ciclo lunar, pueden ser muy variopintos, originales, locos, inquietantes y/o especialmente reveladores, pudiendo además estimular nuestra creatividad, al aportarnos alguna idea ingeniosa, o bien, ofrecernos alguna visión acerca de nuestro futuro o una nueva perspectiva ante la vida.

La intuición puede venir de golpe como una especie de flash que nos estremece o, en todo caso, advertirnos de cambios radicales, situaciones críticas o sucesos inesperados que, de otra manera, no habríamos podido advertir, permitiéndonos estar, al menos hasta cierto punto, prevenidos ante ello.

También es posible que experimentemos curiosas sincronicidades, más de las habituales, así como mensajes del universo que llegan, en algunos casos, de la forma menos pensada.

La imaginación, por su parte, se verá muy estimulada, y ello, aunado a la necesidad de cocrear que movilizará esta Luna llena acuariana y al pulso creativo, espontáneo y expresivo del Sol en Leo, puede potenciar enormemente nuestra creatividad, invitándonos a explorar nuestra autoexpresión, poniendo de manifiesto nuestro lado más ingenioso y original.

A nivel familiar y afectivo pueden detonarse cambios radicales, momentos de crisis, incertidumbre e inestabilidad, situaciones sorpresivas, giros de timón, etc.

Esto puede manifestarse, en algunos casos, como rupturas, mudanzas, viajes repentinos, la llegada de un nuevo miembro a la familia, reformas en la casa, o bien, a través de gastos o ganancias inesperadas, de pérdidas o incrementos que alteran la economía familiar, como puede ser un despido, un ascenso o una nueva oportunidad de empleo, una herencia, una beca o una ayuda, en fin, situaciones inesperadas o que no dábamos por sentadas, que afectan positiva o negativamente el plano material que, con  Urano en Tauro como dispositor de esta Luna llena,  podrían llegar a darse.

Por suerte, con el trígono que Marte en Virgo se encontrará realizando con Júpiter en Tauro,  es probable que pueda surgir un nuevo empleo o iniciativa productiva que propicie la abundancia y la expansión económica, pudiendo incluso llegar a fomentar el ahorro.

Con la Luna llena en Acuario también es posible que nos replanteemos la forma que tenemos de gestionar la vida íntima y familiar, o cambiemos de perspectiva en cuanto a cómo enfocamos y experimentamos lo familiar y afectivo.

Puede, por ejemplo, que aquellos que no querían tener hijos pasen por alguna especie de crisis interior o algún cambio trascendental en su vida que les haga replantarse la posibilidad de tener descendencia.

O puede ser que alguien que siempre quiso tener familia ahora se sienta tentado por la idea de vivir sólo y ser libre e independiente en el plano afectivo.

Sea como sea, puede que este plenilunio represente para algunos una nueva, e incluso original, manera de percibir y experimentar lo familiar y lo afectivo, o bien, el surgimiento de una actitud más bien irreverente, libre y desapegada respecto a esa faceta de la vida.

En este sentido, la necesidad de libertad y el desapego emocional de la Luna llena acuariana nos llevará, con Saturno (su dispositor tradicional) retrógrado en Piscis, a redefinir nuestros límites ante todo aquello que rezume drama, victimismo, engaño y manipulación, así como ante las ilusiones y fantasías que nos seducen como cantos de sirena, consumiendo nuestro tiempo, atándonos a incertezas que nos restan libertad e independencia, y esto va a abarcar tanto ese drama que emerge de nuestro propio caos interno, como aquel referente a nuestros vínculos, ya sea en el plano familiar y afectivo,  como en el ámbito de la amistad y la interacción grupal y colectiva.

Debemos procurar, eso sí, no bloquear nuestra sensibilidad y nuestra compasión erigiendo barreras de frialdad ante la experimentación de nuestras emociones y de nuestra conexión interna con aquellos que nos rodean pues existe el riesgo de insensibilizarse ante el genuino dolor ajeno, así como ante las propias urgencias emocionales y espirituales, por miedo a sentirnos vulnerables, a sufrir,  a comprometernos en asumir nuestra responsabilidad afectiva y a perder la libertad de nuestro espacio íntimo.

Hemos de aprender entonces a discernir entre la libertad, la independencia y la capacidad de fluir emocional y afectivamente y el apego evitativo que, disfrazado de desapego, nos hace desconectar de nuestras propias emociones y evadirnos de nuestros vínculos para protegernos, afectando nuestra salud emocional y nuestra conexión con familiares y afectos.

Por contraparte, Saturno retrógrado en Piscis, como dispositor de esta Luna llena acuariana, fomentará la inspiración e imaginación productivas que contribuyan a nutrir y canalizar nuestra necesidad creativa, así como el trabajo y la dedicación contante a esos sueños que nos encaminen hacia una mayor libertad y a aquellos que nos permitan cocrear con otros realidades que pueden parecer utópicas, pero que claman por verse manifestadas, esos que impulsan cambios y nuevos paradigmas más acordes con un nuevo estado de consciencia, más elevado, más despierto, no sin pedirnos a cambio una cuota de trabajo interno, una reestructuración profunda y una reorganización de nuestra psique que nos de una base más sólida en cuanto a nuestra sensibilidad, una espiritualidad más firme y mayor resiliencia a nivel emocional.

No obstante, puede que Saturno retrógrado en Piscis nos lleve a replantearnos la necesidad de sacrificar algunas metas, la posibilidad de renunciar a nuestra estabilidad por cumplir algún sueño o, por el contrario, la de posponer algunos sueños o poner límite a nuestras fantasías en pro de la estabilidad en algún ámbito de nuestra vida.

Podría incluso hacernos pasar por dolorosas pruebas para darnos un baño de realidad ante algunas ilusiones o sueños que parecieran irrealizables o que hemos de redimensionar y adaptar a nuestras posibilidades actuales, enseñándonos así a aceptar, a soltar y a fluir con una actitud pragmática y humilde ante aquello que, al menos por el momento, se antoja imposible o inalcanzable, lo cual no quiere decir darse por vencidos, sino aceptar que todo tiene su momento, que si algo ha de ser se manifestará en el momento perfecto, cuando las condiciones estén dadas, que cuando la vida nos niega algo es por una razón superior que muchas veces escapa a nuestra comprensión, que en ello hay una enseñanza trascendente, incluso puede que hasta una bendición encubierta, y que los sueños hay que trabajarlos con tezón, paciencia y fe inquebrantable, que no valen medias tintas, que hay que disciplinarse primero y preparar una estructura y bases sólidas para poder manifestarlos, que ante cualquier dificultad no hay que sentirse fracasado sino fortalecido y madurado espiritualmente, así como también enriquecido con la sabiduría profunda, el amor incondicional y la inspiración que han surgido en el proceso.

En otro orden de ideas, este plenilunio nos presentará el desafío de una T cuadrada entre la Luna llena en Acuario, el Sol en Leo y Júpiter en Tauro como punto focal, que nos invitará, entre otras cosas, a esforzarnos por aprovechar de forma más óptima nuestro potencial creativo, siendo más proactivos, ingeniosos, originales y autoexpresivos, atreviéndonos a mostrar nuestros talentos, a crear y a cocrear estimulando así nuestra expansión económica, aunque ello requerirá una inversión de recursos, ya sea materiales, como puede ser dinero o recursos tecnológicos, o inmateriales, como pueden ser  nuestra cultura, destrezas, sabiduría y creatividad.

Lo importante es ponerse manos a la obra y asumir nuestro propósito con claridad, valentía y una actitud empoderada.

Esta configuración energética nos dice: crécete en las dificultades pues dentro de ti habita un enorme potencial creativo del cual te estás haciendo más consciente, atrévete pues a brillar aprovechando toda esa creatividad que hay en tu interior, sácala a la luz y permítete ser el protagonista de tu juego creativo, estimulando tu expansión, incrementando la confianza en tus valores y recursos, así como también tu autoestima pues desde esa base firme podrás brillar más seguro.

No importa si en un principio no encuentras el sentido o si tu propósito no está dando los frutos que esperabas, enfócate en aportar tu rayito de luz al mundo y, ante tu esfuerzo y dedicación, si hay claridad en tu propósito, el sentido acabará apareciendo fértil y firme, manifestando la expansión y abundancia que mereces.

Deseo pues que esta Luna llena acuariana puedas encontrar en tu interior esa libertad por la que clama tu alma, que entables amistades sanas que contribuyan a tu madurez emocional y espiritual y que sean un apoyo seguro en los momentos más difíciles, que tú también seas consecuente con estas y les aportes tu luz y empatía, especialmente cuando sientas que la frialdad de su entorno las sumerge en la tristeza o que las carencias les aquejan a pesar de sus esfuerzos por salir adelante.

Que aprendas a poner límites a aquello que te agota energéticamente, a los dramas que te drenan, a los abusos de autoridad y a las dependencias insanas y abusivas.

Que sepas discernir cuando tu cooperación, generosidad y solidaridad son necesarias, poniendo en práctica la comprensión, la empatía y la compasión y cuando has de decir no o basta a quien pretende aprovecharse de ti, manipularte o vampirizarte.

Que consigas poner orden en tu caos interno y sacar de este el néctar de la imaginación fértil canalizándola con fines creativos, aprovechando tu inspiración de forma práctica y productiva.

Que aprendas a templar las emociones ante tanta agitación interna sin dejar por ello de sentir, ni perder tu humanidad, volviéndote un témpano de hielo.

Que disfrutes del momento presente, del aquí y el ahora, que aprendas a soltar el pasado doloroso, no sin haberte dado a la tarea de indagar en su origen y hacer el consecuente trabajo interno para liberarte a ti y tu linaje de esos traumas añejos y esos karmas ya caducos, y que, de esta manera, proyectes un mejor futuro desde este momento presente tan sagrado y único.

Que satisfagas tu necesidad de ser original sin plegarte a modas y a condicionamientos de masa que con oscuros objetivos se tienden ante la humanidad, aborregándola y subyugándola.

Que aproveches tu libre albedrío para generar una estructura espiritual firme que te sostenga, haciéndote cargo de tu práctica espiritual y tu trabajo interno, al tiempo que lo empleas en utilizar tu inspiración y creatividad de forma productiva para sostener tu plano material, generando una sinergia entre ambos planos, físico y espiritual, para que aquello que aportes al mundo, lo hagas de forma consciente y que lleve el sello de tu divinidad interior, estando bien enraizado, en terreno fértil, siendo provechoso para los otros  y fructífero para ti, fomentando así la abundancia para todos.

Que tomes consciencia del maravilloso universo del que formas parte, lleno de diversidad de seres, culturas, creencias y formas de percibir la realidad y de experimentar la existencia y que descubras que, en esencia, todos somos iguales a pesar de nuestras aparentes diferencias, aprendiendo así a ser más humano y fraternal y a no perder tu tiempo evolutivo enredado en conflictos ideológicos que nos distraen de lo realmente importante y trascendente. En definitiva, que no seas parte del circo ni te creas la película.

Que te sientas libre sin que ello implique que te desconectes del resto de la creación y que dejes de asumir tus responsabilidades. Recuerda que eres uno con la totalidad de la existencia, que eres creador, criatura y cocreador, que aún siendo un sólo Ser en esencia, te has manifestado de múltiples formas que tienen algo que aportarse mutuamente para evolucionar.

Que seas pues capaz de ser independiente tanto como interdependiente.

Y, finalmente, te deseo que puedas fluir en tu propio espacio-tiempo mágico, interactuando sana y sabiamente con otros, cocreando así, en ese espacio-tiempo donde coincidís, nuevas realidades, más justas, más sanas, más fértiles, amorosas, hermosas y abundantes, más coherentes con nuestro actual estado evolutivo.

Lo mismo deseo para mí, que no soy más que otro tú.